Resumen y sinopsis de Teatro. Obra reunida de Mario Vargas Llosa
«El teatro y su imaginería son un género privilegiado para representar el inquietante laberinto de ángeles, demonios y maravillas que es la morada de nuestros deseos.» La creación teatral de Mario Vargas Llosa, desconocida para muchos de quienes ya han disfrutado de su narrativa, es parte imprescindible de su carrera y sus inquietudes literarias. Este género le permite ahondar en una de las constantes de su obra: la medida en que las historias que relatamos y nos relatamos, las fantasías con las que pretendemos abrillantar cada día, son una manera de ensanchar nuestra existencia más allá de los límites que impone la realidad cotidiana. La señorita de Tacna (1981), Kathie y el hipopótamo (1983), La Chunga (1986), El loco de los balcones (1993) y Ojos bonitos, cuadros feos (1996), cinco textos dramáticos donde temas tan cardinales para el ser humano como la familia, la vejez, el orgullo, el destino, el amor, los deseos, el machismo, la dinámica entre presente y pasado y la naturaleza del talento creador quedan envueltos por otro: el papel de la ficción en la vida, la rectificación de la vida que obra la ficción.
El teatro de Mario Vargas Llosa refleja la inquietud de lo que significa crear historias, tomando ciertas realidades para convertirlas en ficciones (o viceversa) a través de las cuales explora al ser humano en relación a su pasado, su postura ante la vida, el amor, la creación artística y la lucha por preservar ciertos valores idealistas, en las que el autor nunca deja de lado esas raíces y ese aire bucólico y melancólico de un país que le vio nacer y con el cual crea una identidad desde la pluma, inseparable en el tiempo y en la memoria literaria.
- Ojos bonitos, cuadros feos:
Obra que en principio plantea el encuentro erótico, en un departamento, de Rubén Zevallos, teniente de la Marina, y Eduardo Zanelli, crítico de arte, pero que conforme se van conociendo, surgen debates que giran en torno a temas como la sexualidad reprimida, el choque clasista característico de una parte de la sociedad limeña, y el abordaje de la crítica artística desde la naturaleza de la obra creada y las valoraciones hechas a los talentos noveles que intentan abrirse paso, con no siempre buena fortuna. La entrada en escena de Alicia, aspirante a pintora, interés amoroso de Rubén y alumna "silenciosa" de Eduardo, desencadena un enfrentamiento dialéctico que deja en evidencia la frustración de la vida, desde lo amoroso y lo vocacional, y el impacto emocional que causa, muchas veces, la crítica vacía, superficial y "carente de talento".
- La señorita de Tacna:
Obra que recrea el proceso creativo de Belisario, novel autor que intenta escribir una historia de ficción tomando a su vez elementos de la realidad de su entorno familiar, y que termina retratando el perfil de su abuela Elvira, llamada también Mamaé, con un pasado que gira en torno a un amor de juventud frustrado que la llevó a refugiarse en la soledad y los recuerdos vividos en el contexto del Perú de principios del siglo XX, que aún cicatrizaba las heridas de la "Guerra del Pacífico" con su vecino Chile.
- El loco de los balcones:
Presenta la aventura quijotesca del anciano profesor Aldo Brunelli, en una cruzada que intenta preservar una parte del patrimonio arquitectónico colonial histórico de Lima, representado en los balcones, piezas importantes de las grandes casas aristocráticas de la época del virreinato en el Perú, pero que lucen anticuadas a la luz de las necesidades urbanísticas del presente en donde a través de una, paradójica, "Dirección de Conservación del Patrimonio Artístico y Monumentos Históricos", se lleva a cabo una política sistemática de destrucción de ese patrimonio que encuentra una tenue resistencia en la labor de Brunelli, junto a su hija Ileana y algunas amistades. La obra refleja una lucha singular entre pasado y presente, memoria y actualidad, que retratan a su vez una serie de circunstancias familiares que dejan al descubierto ilusiones postergadas, sacrificios ignorados y unas realidades sociales que evidencian cambios profundos y dolorosos de asumir, a pesar del idealismo y las buenas intenciones que se tengan para preservar el arte y hasta la vida misma, con sus ensoñaciones.
- Kathie y el hipopótamo:
Recrea el sueño de una mujer, Kathie Kennety, "señora decente, católica, limeña, madre de familia", por escribir un libro, basado en sus experiencias de viajes por ciertos lugares de Asia y África, instalada en alguna buhardilla, haciendo alarde de un criterio cultural bien formado, puntualmente "afrancesado", a partir del cual entra en juego el doble propósito ficcional-real para proyectar una historia personal, marcada por las decepciones del matrimonio, haciendo una especie de catarsis emocional para liberar sus frustraciones y describir lo mundana que muchas veces puede ser la vida, pero que asimismo no pierde el encanto para crear un mundo fecundo y peculiar, literario y artístico.