Resumen y sinopsis de Por trece razones de Jay Asher
No puedes poner freno al futuro.
Ni reescribir el pasado.
La única forma de revelar los secretos es... darle al «Play».
Una caja, trece caras de casete, trece culpables y una víctima.
Apenas han pasado dos semanas desde el suicido de Hanna, cuando Clay encuentra una misteriosa caja en la puerta de su casa. La caja contiene unos casetes que serán el comienzo de un perverso juego que involucrará a todos los responsables de la muerte de Hanna.
Reseñas:«Inquietante, bella y devastadora.»Chicago Tribune
«Una visión fascinante de la mente de alguien que tomaría esta terrible decisión. Brillante e hipnótico.»Kirkus Review
«Ritmo trepidante y emoción vertiginosa.»School Library Journal
Han participado en esta ficha: Soldem dixy
Será porque la adolescencia es un periodo de mi vida que me pilla muy lejos pero, Por trece razones, me ha parecido una novela insulsa y aburrida que, pese a que lo intenta, no consigue llegar a un lector que no tenga la misma edad que la de los protagonistas. Y antes de juzgarme de manera implacable, quizás deberías seguir leyendo.
Jay Asher es la autora de esta novela. Obviamente debutó con esta obra y eso se nota. Asher es una escritora bastante mediocre que posee un estilo de escritura sencillo, ágil y con una buena ejecución. Consigue este efecto gracias a una prosa dinámica, ingeniosa aunque con un desarrollo mejorable, un lenguaje pragmático y unas descripciones demasiado básicas como para atraer la atención del todo. Pero lo peor, con diferencia, son los personajes. Son estereotipos que cumplen el papel a la perfección: el deportista, la animadora, la mosquita muerta, el buen chico, etc. Cada uno de ellos presenta una construcción incompleta, porque están descritos desde la mirada de Hannah, que junto con Clay, son los protagonistas del libro. Podrías pensar que la autora se ha esmerado más al crear a su pareja protagonista. Bueno, eh... no. Ambos también representan, de manera muy simplificada, un papel típico de las películas adolescentes.
Por trece razones es una novela de intriga con un trasfondo tan serio como el tema del suicidio. Pero haré un pequeño resumen para que entendáis un poco mejor de que va todo esto. Clay es un chico normal que un día al volver del colegio, se encuentra una caja llena de cintas de casetes. Primer inciso. Que alguien menor de treinta años sepa que es un casete, ya me resulta sorprendente. Pero que posea un sistema de reproducción/grabación para esta clase de cintas, me parece una utopía difícil de creer incluso con toda la imaginación del mundo. Hay siete cintas con las caras numeradas del uno al trece. Decide escucharlas y se lleva un susto. La narradora en estas cintas es Hannah Baker, un chica que se suicidó hace un tiempo, y de la que Clay estaba profundamente enamorado. Hannah nos va desvelando como su vida se torció y decidió que morir era mucho mejor opción que seguir sufriendo. Y si, trece personas, propiciaron la caída en el abismo de la pobre chica. ¿Qué le ocurrió a Hannah? ¿Qué hizo (o no hizo) Clay para estar en esa lista? Leedlo y lo averiguaréis. Se que dicho así puede parecer muy interesante. Pero creedme, no lo es. Y no es por minimizar las emociones de Hannah, o por disculpar la forma en la que la trataron, pero todo el libro me parece un muestrario de problemas del primer mundo de una chica privilegiada que no supo cuando pedir ayuda. El resto, son solo excusas y un reparto de pecados. No me gusta la gente que hace algo y luego desliza la culpa a los demás. Es tu decisión, asume las consecuencias. Así que a lo largo de todo el libro vemos este comportamiento, hasta el final, que dicho sea de paso, no solo es abierto si no decepcionante.
Definitivamente, Por trece razones, está muy orientado a un público en concreto y, fuera de él, dudo mucho que guste a otro tipo de lectores. El drama adolescente no es del gusto del todos y, en este libro, sobra demasiado. Las continuas interrupciones de la historia de Hannah, la excesiva carga emocional de Clay y la existencia de tanto joven moralmente reprobable, entorpecen una lectura, ya de por si pesada. Así que os aconsejo que escapéis. Y os aseguro que hay más de trece razones para hacerlo...
Historia para recapacitar, aunque le faltó algo de chicha al final.
Muy bien contado pero se queda corto con un tema muy delicado, el suicidio entre adolescentes. El bullying actualmente es muy fuerte, sobretodo en la adolescencia, creo que el autor debería de haber sido más duro en este tema para que a través de la lectura, ayudará a tomar consciencia. En fin, otro libro más que se queda en el limbo.
Me ha gustado el libro, es emocionante y hace reflexionar, pero en algunas ocasiones no llegué a entender del todo el comportamiento de Hannah. Las razones son demasiado nimias para llegar tan lejos como un suicidio, pero aún así te deja pensando.
Tiene muy buena pinta pero luego lo he leído y no me ha gustado demasiado.
Me ha gustado el libro, te hace pensar, es diferente, mantiene el suspense. Hay muchas cosas curiosas allí, como todos acaban conectándose, como influyen en su vida, como parece que en realidad no son cosas demasiado graves, pero ves el efecto de bola de nieve, y lo acabas entendiendo. Me gustó mucho el final, justo lo que tenía que ser aunque ni lo esperase, la esperanza.
Triste, como una cadena de bajezas lleva a una adolescente al suicido, para pensar.
Libro extraño, ya que te hace reflexionar sobre como tratamos a las personas que tenemos a nuestro alrededor y que a veces hacemos daño a la gente sin darnos cuenta. En resumen, un libro entretenido y diferente.
Es fácil de leer pero no llega a emocionar.
Las razones de Hannah para suicidarse son nimias. Es una joven con poca o ninguna autoestima que hace que cualquier tropiezo, por pequeño que sea, le induzca a morir.
Hace partícipe de sus razones a la gente que, según ella, han tenido algo que ver con su decisión.