Resumen y sinopsis de La vuelta al mundo en ochenta días de Julio Verne
Phileas Fogg, un verdadero "gentleman", miembro del Reform Club, arriesga toda su fortuna en una apuesta. Se compromete a dar la vuelta al mundo en ochenta días, basándose en un cálculo hecho por el periódico "Morning Chronicle".
A través de este fascinante viaje por el globo, Julio Verne nos presenta el verdadero tema central de la obra, que no es la mera descripción geográfica, sino el dominio del tiempo, alcanzado por el hombre gracias al desarrollo tecnológico y de los medios de comunicación. Una de las obras más conocidas de Verne que ha sido llevada al cine y la televisión en numerosas ocasiones.
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Novela que leí hace 15 años y me había gustado bastante más por ser una versión condensada de la editorial "Nueva Auriga".
En esta ocasión escogí una edición completa (Anaya Tus Libros) y en ciertos capítulos me ha recordado una frase de Delibes, "hay obras que describen pero no narran".
Aún así siempre es una buena opción aprender geografía de la mano de este señero escritor que siempre ha tratado de instruir deleitando.
Inmortal obra de Verne, imposible no disfrutarla, aunque hayan pasado los años. La visión que este autor tenía sobre lo que el hombre podía o no podía hacer se plasma en esta historia, donde Phileas Fogg pone su fortuna en juego apostando a que puede dar la vuelta al mundo en 80 días.
Sus aventuras han hecho las delicias de generaciones de jóvenes y no tan jóvenes. Muy buena.
He leído este libro en dos épocas muy distintas de mi vida: una en la adolescencia y otra en la madurez.
Me encantan los detalles que el autor muestra y la personalidad de cada personaje. Quizás lo disfruté más en la adolescencia, donde la aventura y los imposibles cobran más sentido.
Un gran clásico de Verne. Las aventuras del excéntrico Phileas Fogg y su servidor Picaporte, con su perseguidor implacable, el detective Fix, dejan un buen sabor de lectura. Emocionante y trepidante relato.
Lectura recomendada de Julio Verne. Me gustó este libro por la cantidad de detalles que da y las historias que cuenta en él. Leedlo.
Como leí en este apartado, la premisa es una tontería y la historia, aunque se deja leer, no me llegó a apasionar.
Lo leí en un arranque de aburrimiento y quedé fascinado. Estuve siempre atento a lo que transcurría en la historia de los viajeros. Sencillo de leer.
Clásico entre los clásicos, es la obra que todo lector se tiene que haber leído. Tiene lo que se le pide a Julio Verne: un libro de aventuras que te haga pasar un buen rato. La gracia del asunto es ver si Fogg, el impasible protagonista inglés (muy bueno el retrato que el autor realiza del británico) consigue ganar su apuesta de dar la vuelta al mundo en 80 días, Lo de menos pues será el recorrido por los países, esquemático, en favor de la emoción de esa apuesta y el seguimiento de un policía que lo acusa de un robo a un banco. El final no tiene desperdicio.
Me ha encantado. Es un clásico de la literatura de aventuras. He de decir que he leído una versión juvenil en francés, muy resumida debido a la dificultad para los estudiantes de este idioma. Aún así he disfrutado mucho y no descarto leer el libro original.
Un libro que entretiene con sus aventuras, quizá más agradable para un adolescente que para un adulto, pero que no defrauda en su intención de ser un buen libro para pasar el rato.