Resumen y sinopsis de Para las seis cuerdas de Jorge Luis Borges
La milonga es una forma de la música muy popular en ambas riberas del Río de La Plata. Considerada precursora del tango, sus letras hablan de los "guapos" y cuchilleros de las últimas décadas decimonónicas y primeras del siglo veinte. Borges siempre mostró su admiración por esa época -que alcanzó a conocer en sus primeros años de vida-, lo que lo llevó a componer una serie de letras de milonga, alguna de las cuales ha sido musicalizada.
Del prólogo de Borges:
Toda lectura implica una colaboración y casi una complicidad. En el Fausto, debemos admitir que un gaucho pueda seguir el argumento de una ópera cantada en un idioma que no conoce; en el Martín Fierro, un vaivén de bravatas y de quejumbres, justificadas por el propósito político de la obra, pero del todo ajenas a la índole sufrida de tos paisanos y a los precavidos modales del payador. En el modesto caso de mis milongas, el lector debe suplir la música. ausente por la imagen de un hombre que canturrea, en el umbral de su zaguán o en un almacén, acompañándose con la guitarra. La mano se demora en las cuerdas y las palabras cuentan menos que los acordes. He querido eludir la sensiblería del inconsolable “tango-canción” y el manejo sistemático del lunfardo, que infunde un aire artificioso a las sencillas coplas. Que yo sepa, ninguna otra aclaración requieren estos versos.
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Un libro corto y disfrutable. Lo curioso sería darle musicalidad con "las seis cuerdas". Tal vez esté demás aclarar que en estos versos hay bastante musicalidad, debido a que son milongas; el único "error" en alguno de ellos son las rimas que rozan con lo meloso por la búsqueda de la misma terminación. Sin embargo, se ve el color local, la historia de Buenos Aires. Suenan personajes borgeanos, como el histórico Juan Muraña. "Milonga de Albornoz" me pareció el poema más musical y más preciso en cuanto a la métrica.
Recomiendo este libro al lector de Borges que quiera incursionar en una clase de poemas que no incluye a James Joyce, Homero, Heráclito ni la historia universal sino a Buenos Aires y su mitología.
Corto pero intenso ejercicio de poesía en el cual Borges compone milongas para ser leídas al ritmo de seis cuerdas que hay que imaginar. Se sienten sinceros los poemas y tienen una cadencia tan particular que no cuesta nada soñarlos acompañados con lentos rasgueos de guitarras.
Excelente, como todo lo de Borges.
Las milongas que componen este pequeño libro son, a mi gusto, geniales. Esplendido, la verdad aplaudo cada día mas y mas a Borges. Todas y cada una son magnificas pero la "Milonga de Jacinto Chiclana" es la mejor. Se lo recomiendo a todos.
Este conjunto de poesías -letras de milonga- ha limitado la creatividad de Borges al estar, necesariamente, constreñida su temática a los "malevos" que asolaban los arrabales de Buenos Aires y de Montevideo. De lectura casi exclusiva para rioplatenses.