- Su objetivo es prepararse ante un posible apocalipsis.
- Está situado en medio del Ártico.
Desde hace unos años, Noruega mantiene un búnker alojado en una montaña en medio del Ártico donde preserva todos los tipos de semillas del mundo, en el caso de que ocurra una gran catástrofe mundial y haya que comenzar a plantar desde cero. Ahora, esa montaña tiene un nuevo inquilino, el Archivo Mundial Ártico, donde se van a guardar los libros más importantes del mundo para preservar la información en caso de apocalipsis.
Esta iniciativa está liderada por la compañía Piql, basada en Noruega, y que ha desarrollado una tecnología capaz de almacenar la información de manera analógica sobre las clásicas tiras de film, pero en varias capas a la vez, por lo que su capacidad de guardar información se dispara. La cinta usada está diseñada para poder resistir las inclemencias del tiempo y puede durar hasta 1000 años, aunque el proyecto tiene un horizonte de 500.
La elección de este formato no es un capricho. Es mucho más resistente y duradero que los discos duros actuales y, además, tiene otra característica relevante a la hora de preservar la información: los datos no pueden ser alterados de ninguna forma.
El archivo estará situado dentro de una mina de carbón en desuso, cuyas condiciones son muy estables, tanto a nivel sísmico como de variación de la temperatura, que se mantiene siempre por debajo de los 0 grados. Además, está lejos de cualquier zona de interés militar, lo que asegura su supervivencia en caso de conflicto.
Por el momento se van a introducir los libros más relevantes del Archivo Nacional Noruego, junto con obras representativas de los archivos brasileños y mexicanos. Es de esperar que poco a poco, el número de libros aumente hasta convertirse en un gran repositorio global.
¿Qué os parece esta iniciativa? ¿Será útil alguna vez o es mejor no tener que comprobarlo nunca? Os esperamos, como siempre, en los comentarios.
Vía: Digital Journal
(Valencia, 1975) escribe bordeando territorios fronterizos, entre sombras y engranajes, siempre en terreno de sueños que a veces se convierten en pesadillas. Actualmente es el Coordinador de la red social Lecturalia al mismo tiempo que sigue su carrera literaria.