Resumen y sinópsis de Guía del autoestopista galáctico de Douglas Adams
Un jueves a la hora de comer, la Tierra es demolida para poder construir una nueva autopista hiperespacial. Arthur Dent, un tipo que esa misma mañana ha visto cómo echaban abajo su propia casa, considera que eso supera lo que una persona puede soportar. Arthur huirá de la Tierra junto a un amigo suyo, Ford Prefect, que resultará ser un extraterrestre emparentado con Zaphod Beeblebrox, un pirata esquizoide de dos cabezas, en cuya nave conocerá al resto de personajes que lo acompañarán: un androide paranoide y una terrícola que, como él, ha logrado escapar. Douglas Adams fue el creador de toda una serie de manifestaciones de la Guía del autoestopista galáctico: primero fue novela radiofónica, luego se convirtió en libro, series televisivas y teatrales, un juego de ordenador, cómics y toallas de baño. La película ascendió hasta las cumbres de la producción cinematográfica. Esta edición cuenta con entrevistas y materiales a partir del rodaje de la misma.Ha participado en esta ficha: w0lf
Divertida y bien narrada aunque algo corta. Buenos personajes en especial Marvin
Genial. La imaginación para inventarse tantos nombres (lo mismo para el traductor) y que todo tenga sentido, encaje y además te haga reír en más de una ocasión. Imprescindible.
Sin lugar a dudas, es la novela de ciencia-ficción más desquiciada, humorística y gamberra de la galaxia. Los personales son canela y ambrosía fina. La historia en la que se desarrolla no podría ser menos y ocurre todo lo estrambóticamente posible en un mundo sideral mucho más grande y matizado de lo que nos creemos los simples terrícolas. Un notabilísimo acierto acaece cuando creemos que todas las peripecias de sus granados personajes nos llevan por los derroteros de la aleatoriedad, el chiste y el despiporre, y es cuando nos despabila con un elegante giro de los acontecimientos, (cómo no podría ser de otra manera en este género). Llegamos a descubrir una revelación filosófica-existencial sobre el hombre y su lugar en el mundo. Llegados a este punto a lo mejor ya no nos reímos tanto.
Es un libro que hay que leer en algún momento de la vida. Es la ejemplificación de una aventura completamente desinhibida, desestructurada y completamente tronchante. Es la “Space Opera Nivola” que podría decir Unamuno. De asombrosa imaginación, permanecerá en la retina. Dónde el monolito y el hueso de Kubrick halló el sentido de la evolución humana aquí digamos que teniendo un poso parecido, monolito y hueso son monologuistas del club de la comedia…(y muy buenos). Arthur Dent y su amigo Ford Prefect, (sí, sí, Prefect)…nos harán gozar de la amistad más apoteósica de la vía Láctea.
Nos vemos en el restaurante del fin del mundo…llevad al menos una toalla, que tiene muchos usos.
Después de un comienzo muy original, el libro va pasando del surrealismo al absurdo, en ocasiones una manera muy facilona. Me ha decepcionado bastante, a pesar de ser muy corto el final casi se me atraganta.
La primera vez que lo leí se me hizo un poco pesado (y eso que es corto), ahora que lo he releído he disfrutado como un niño.
Gran libro con momentos realmente ingeniosos que hacen reír. Próxima parada: El restaurante en el Fin del Mundo.
A partir de 2001, cada 25 de mayo se celebra el día de la toalla en honor de Douglas Adams y como recordatorio de uno de los utensilios más famosos de la literatura tras la edición del primer libro de su mundialmente reconocida serie, "Guía del autoestopista galáctico". Dos semanas antes de esa hecha, concretamente el 11 de mayo de 2001, Douglas Adams moría de un infarto mientras estaba en el gimnasio y buena parte del famoso y envidiado humor británico desaparecía con él.
Douglas Adams me hizo llorar de risa casi como nadie, me hizo devorar sus libros con un ansia enfermiza, me proyectó imágenes inigualables y me llevó a viajes por unos universos que nadie podría haber llegado a imaginar, excepto una mente tan prodigiosa, exhuberantemente cínica e irónicamente ilimitada como la de este autor, nacido en Cambridge y muerto en California a la edad de 50 años. Pero no sólo le lloraron los personajes de la más surrealista e irreverente serie científico-literaria sino que otros personajes, como Dirk Gently, el primer detective holístico de la historia y con el verdadero nombre de Svlad Cjelli, o todos los animales que pueblan las páginas de "Mañana no estarán: en busca de las más variopintas especies de animales al borde de la extinción".
Imaginativo. En ocasiones puede llegar a lo absurdo , pero no olvidemos que se trata de una obra de ciencia-ficción y humor. Por lo que, la base de la historia es todo pura invención.
No me identifico plenamente con este tipo de humor, pero el talento del autor para escribir es innegable, y la novela resulta bastante entretenida aunque no sea uno un adepto de la ciencia ficción. Eso sí, muchas veces la trama decae y el autor resuelve con situaciones traídas de los cabellos que pretenden ser jocosas, a veces sin conseguirlo.
Género de ficción/cómico. Es un libro corto, con una historia que da la sensación que se queda a medias...Quizá de haber sido un poco más extensa y contar algo con un principio y un final más claro hubiera mejorado. No tiene mucho de especial pero he leído de peores.
Muy buen libro. Ciencia-ficción y humor surrealista. Nunca sabes cómo puede acabar cada situación. Gran historia con grandes personajes.
Libro divertido de lectura fácil. Recomendado para los fanáticos de la ciencia ficción, como los que no. Ideal para leer en la playa, sus capítulos son cortos y no se necesita mucha atención. Contiene buenos chistes sobre la humanidad y especies extraterrestres. Una comedia científica.
No me gusta la ciencia-ficción y creo que es un libro ideal para gente como yo. Lo leí debido a que mucha gente me hablaba de él y me resultaba raro no haberlo leído. Libro ameno y con algunas dosis de humor, sin ningún tipo de pretensión literaria. Correcto para pasar un buen rato.
El comienzo es genial. Es un libro loco, entretenido y ameno. Se lee rápido y se hace corto. El humor sin pies ni cabeza también es inteligente.
La galaxia es un lugar entretenido. Su concepto sobre la Tierra te da que pensar, si que explicaría algunas cosas.
La imaginación de Douglas Adams está descontrolada.
Lo malo es que es una introducción, el libro no tiene propiamente un desenlace y te quedas a medias.
Cuando ya me estaba metiendo en faena pensado que me quedaba un buen trozo me encuentro con el...epílogo.
Personalmente me ha parecido una tomadura de pelo, también es cierto que no he visto la película pero, salvo algunas anécdotas que
se podrían haber contado en 30 páginas a lo sumo, no le veo interés.
Genial libro de ciencia-ficción con muchos toques de humor y situaciones absurdas que hacen que sea un placer leerlo. Como punto en contra, su corta duración y que no tiene final, pues la trama queda completamente colgada ya que continúa en los 4 libros que le suceden.
Hace algunos años vi la película y no pude resistirme al libro. Es una novela corta de ciencia ficción sin más pretensión que entretener. Y lo consigue, incluso tiene ciertos momentos realmente divertidos.... De empezar a leer sin ganas, con los ojos medio cerrados y tener que volver a leer algo porque no tiene mucho sentido para empezar a reír durante diez minutos.
Además, adquiere un nuevo tinte ahora con las tablets y ereaders... ya me entenderéis...