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Esos escritores y sus locos cacharros: gadgets y ayudas tecnológicas a la escritura

AutorAlfredo Álamo el 1 de marzo de 2016 en Divulgación
  • Descubre algunos de los dispositivos que te pueden hacer la vida más fácil como escritor.
  • Bolígrafos inteligentes, teclados y webs que te pueden ayudar.

Ratón de ordenador abandonado sobre un paisaje de césped verde.

Nada te impide sacar el fajo de papeles desordenados, un buen lápiz, sentarte a la sombra de una higuera y pasar la tarde poniendo en orden tus pensamientos. Luego, en la comodidad de tu casa, a la luz de un quinqué, podrías pasar a limpio tu novela aporreando la vieja Olivetti portátil que todos guardamos en una maletita dentro del armario. Pero si te gustaría trastear con unos cuantos cacharros modernos y visitar unas webs interesantes, hoy en Lecturalia te vamos a hablar de la tecnología y el oficio de escribir.

El Echo es un smartpen de lo más curioso, ya que no sólo permite escribir –como cualquier otro bolígrafo- sino que graba todo lo que anotas, permitiendo además meter notas de audio sincronizadas con la escritura, para luego pasarlo al ordenador. Uno de sus modelos es compatible con Evernote.

Si no eres tan dependiente de la tecnología, pero te gustan los bolígrafos, aprovecho para recomendar el Yoropen, posiblemente el que tiene el diseño más ergonómico que conozco e ideal si te vas a pasar mucho tiempo tomando notas (sea debajo de la higuera o cualquier otro frutal). También va a sacar una versión smart.

Dejando a un lado los bolígrafos, un escritor hoy en día necesita un teclado que le de confianza, nada de teclas blandas y pequeñas que apenas duran un buen aporreado como toca. Mis favoritos son los Corsair, de sistema mecánico y aluminio, que además van de lujo si entre capítulo y capítulo le das a algún juego.

Si te sobra el dinero, siempre puedes comprar un Qwerkywriter, que convierte cualquier tablet en una máquina de escribir antigua. Otros teclados interesantes, pues los de Apex Steelseries, aunque si estás interesado en la movilidad, existe una amplia gama de teclados plegables para conectar a una tablet que hoy en día pueden ser muy útiles, como el que ofrece Microsoft o el iClever de aluminio.

Imagen de un teclado Qwerkywriter con una tablet.

Ni que decir tiene que una tablet o un portátil son material de primera necesidad para un escritor en la edad de la tecnología, pero eso lo damos por supuesto, claro. Aunque si sois de los que os gusta llevaros todas las miradas podéis usar el teclado Epic de Celluon, que usa la proyección láser sobre una superficie plana para recrear un teclado. Tan fascinante como incómodo.

En cualquier caso, si vas a pasar mucho rato tecleando y quieres ahorrarte el síndrome del túnel carpiano, os aconsejo usar un “dónut de muñeca”. Los hay de muchos y variados tamaños y formas, pero la verdad es que con el tiempo vais a agradecer una buena postura de la mano del ratón. Creedme.

En cuanto a las webs que más nos han llamado la atención para que podáis mejorar vuestra técnica, hoy os vamos a recomendar la nueva versión de Write or Die, herramienta con la que puedes configurar cómo va a ser tu sesión de trabajo (palabras, tiempo, etc.) con la gracia añadida de decirle que si no llegas a lo marcado te bombardee con sonidos desagradables, alarmas visuales y una profunda sensación de decepción. Eso sí, también te ofrece una serie de agradables estímulos si vas por el buen camino. Por desgracia, para disfrutar de todas las funciones de la web, como seguimiento y estadísticas, control de música, hay que pasar por caja.

¿Qué os parece todo este arsenal de cacharros? ¿Son útiles o sólo distracciones de la verdadera esencia de toda escritura? Os esperamos, como siempre, en los comentarios.

Más información: Write or Die 2.

Alfredo Álamo

(Valencia, 1975) escribe bordeando territorios fronterizos, entre sombras y engranajes, siempre en terreno de sueños que a veces se convierten en pesadillas. Actualmente es el Coordinador de la red social Lecturalia al mismo tiempo que sigue su carrera literaria.

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