Ya sabéis que el libro electrónico no sólo va a acabar con la cultura (cada vez que alguien se compra un e-reader, un escritor se suicida; cada vez que alguien se descarga un libro, un escritor suicida un gatito) sino que no tiene ni punto de comparación con El Libro En Papel, quintaesencia del mundo cultural. Porque, además de que nunca podrás utilizar el Kindle para equilibrar las patas de la mesa, un e-book nunca podrá tener el encanto de El Libro En Papel.
Una de esas cosas que nunca podrá tener un libro electrónicos, es el olor a libro nuevo, olor que encanta los lectores empedernidos (siempre y cuando no se trate de una mala edición, en cuyo caso el olor a cola puede llevarte al mundo de la fantasía aunque sea un libro de ensayo).
Pero para solucionar este pequeño inconveniente ha surgido un nuevo producto, Smell of Books, ambientador con diferentes aromas, incluyendo el de libro nuevo, aunque el de “tú tienes gato” debe ser también espectacular. Este producto (obviamente un fake, o al menos eso esperamos) nos ha parecido una manera realmente divertida de reírse de algunos de los absurdos inconvenientes que se les ponen a los e-books, sobre todo desde una añoranza romanticona, que sólo se podría justificar si tu biblioteca está llena de primeras ediciones en lugar de bolsillos baratos y saldos, como me temo está la de la mayor parte de lectores.
Esperamos que pronto aparezcan las fundas para e-readers para que parezca que lo que llevas entre manos sea un libro o que al pasar la página haga el correspondiente ruido y no te miren en el metro como el asesino de intelectuales que eres.
Vía: Twitter@ediciona
13 de junio de 2009 a las 12:14
jajaja! genial…!
2 de julio de 2009 a las 14:46
[…] FUENTE […]
13 de julio de 2009 a las 11:21
[…] Olor a libros: fragancia del mes. Publicado el 11 de Junio de 2009 en el weblog de: Lecturalia. Deja un […]
4 de mayo de 2012 a las 8:03
[…] puede que se haya convertido en realidad. Todos recordamos ese anuncio tan divertido en el que se ponía a la venta un spray «olor a libro» para todos aquellos que notaban que le faltaba algo a su nuevo ereader. Aquello era, evidentemente, […]
26 de junio de 2014 a las 10:58
[…] tampoco es lo mismo leer un buen periódico que una revista del corazón. Debo confesar que soy un fetichista del papel: prefiero leer los periódicos impresos; cuando los leo en Internet, me siento como si comiera un […]