Usamos cookies propias y de terceros con fines publicitarios, de sesión, analíticas y de redes sociales.
Cualquier acción que no sea su bloqueo, o la solicitud expresa del servicio vinculado a la cookie, implican el
consentimiento para su uso. Consulte nuestra
Política de privacidad
Un libro precioso que me ha hecho reír y llorar. Una historia con un fondo tierno y dulce. Un libro para releer y para regalar.
Lo he disfrutado mucho. Me ha recordado a Delibes.
Creo que cada día escribe mejor este autor. Si hay un pero, es que igual que en otro libro de este autor intenta impactar con el final aunque se va intuyendo lo que ha podido ocurrir
Es una pena que un libro que prometía tanto se quede en tan poco. De casi 300 páginas me han parecido interesantes, emotivas y significativas las últimas 100 que es donde por fin se van desentrañando los sentimientos y las vivencias de los personajes. Durante muchas páginas y muchos pasajes me ha parecido estar leyendo todo el rato lo mismo...y como digo es una pena porque algunos fragmentos están muy bien escritos.
Al principio me resultó un poco pesado, me esperaba más, tras leer una tienda en París, he estado a punto de dejarlo, pero después va cambiando y da un gran giro, más acorde con el autor, toca dos temas sociales bastante importantes hoy día, como el alzheimer y la violencia de género.
Tenía expectativas en este libro porque el anterior de este autor me gustó bastante, pero este se me ha hecho pesado, aburrido, predecible, etc, etc etc.
Si tienes horas y horas de tiempo libre puedes gastarlo en leer este libro, si tu tiempo es oro, ahorrate el trabajo, ya te digo que si eres un lector curtido en mil batallas no te va a gustar nada esta historia sosa y soporífera
Lo peor que he leído en mucho tiempo.
Regalo de mi madre en mi cumpleaños. Admiradora ferviente de Maxim Huertas de la tele. No ha leído otro libro, más el de él y el de otro que no recuerdo el nombre que hace programas del corazón en T5 (creo).
Me lo he leído, más que nada porque es un regalo de mi madre. Es el tercero que me regala de él. Me da cosa decirle a mi madre que no me regale más de este autor. Que no me gusta. Que es muy malo. Pero ella siempre me enseñó a no valorar ni juzgar a nadie por el pretérito, siempre hacerlo por el presente.
Eso he hecho: me he leído el libro.
Sigue sin gustarme. Prosa insulsa, e historia insulsa.
Lo siento mamá, no me gusta, no me ha gustado este libro. Es malo mamá, por mucho que se llame Maxim Huertas (como le has puesto a tu gatito) y por muy simpático y buena gente que te parezca. Y sí, en la próxima feria del libro de Madrid conseguiré su firma para ti.
Novela insulsa, no recomendable.