Me regalaron un lobo

Resumen y sinopsis de Me regalaron un lobo de Miguel Martín Fernández de Velasco

El autor se ve sorprendido por una extraña visita: unos vecinos de Villalobos (pueblecito al que iba mucho a pescar), traían en una cesta un lobezno.

 Uno de ellos, que era el maestro del pueblo, contó que los ganaderos habían tirado al río dos sacos viejos, cada uno de ellos con tres lobeznos dentro. Uno de los sacos cayó por la presa y los lobeznos se ahogaron.

El otro quedó varado en una mimbrera, y un chiguito se tiró al agua (cuando ya no le veían los ganaderos), y rescató a los tres lobeznos. Cada uno de los animales tuvo destino diferente: uno fue entregado a un maestro de Tierra de Campos, que tenía mucho interés en criarlo, para estudiar sus reacciones; otro se lo habían confiado a un nieto del alimañero, que quería hacer algo por los lobos, en desagravio por el mucho daño que les había causado su abuelo; y el tercero se lo llevaban al autor, del que sabían (por los libros de Pabluras, y porque le conocían de verlo por el pueblo), que sentía simpatía por los lobos.

El maestro y sus acompañantes trataba así de evitar una guerra entre los ganaderos y otros vecinos de Villalobos, que querían denunciarles por lo que habían hecho con los lobeznos. Al mismo tiempo evitaban que se les diera muerte a los que se habían salvado (como exigían los ganaderos), llevándolos lejos del pueblo.

El autor había visto a los padres del lobezno en más de una ocasión. Conocía muy bien su historia y la cuenta en el libro.