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Lo siento, pero no...libro aburrido y en el que apenas pasa nada, y lo que pasa es en las últimas 40 o 50 páginas, dejando además alguna parte inconclusa o poco explicada para mi gusto. Es una novela corta y por eso la leí pero no merece la pena...es perder el tiempo y ni siquiera la revelación final da para cambiar la impresión del libro.
En general, el susurro de la caracola es un libro aburrido, al que pese a su corta duración le sobran muchas páginas.
El autor escribe de forma clara, sencilla y concisa, pero de forma repetitiva y alarga hechos y situaciones que no son importantes para la trama. Además prescinde de adornos líricos innecesarios y tampoco abundan las descripciones largas o superfluas.
La historia es muy asimétrica y confusa. Al principio, piensas que estas leyendo los pensamientos de una persona trastornada. Una mujer totalmente obsesionada, de la noche a la mañana, con un actor joven. Mientras el autor nos arrastra detrás de esta perturbada, y nos describe una serie de situaciones, que hacen que te lleves las manos a la cabeza y que confirmes la idea de que la protagonista está más loca que una cabra, se van intercalando, sin ningún orden, el pasado de la mujer y su familia lleno de secretos, que hasta el más ciego es capaz de adivinar.
Lo único que se salva de todo este galimatías argumental es el final, que no te esperas y, que te deja la agradable sensación de que leerse el libro no ha sido, del todo, una pérdida de tiempo.
En síntesis, es un libro aburrido, confuso y sin demasiado interés. Cuenta con una protagonista perturbada y bastante tonta en una historia, que por más que me esfuerce no puedo sacarle nada bonito, emotivo o divertido.
Regalo de mi madre. Se salvó únicamente el final...
Lento, lentísimo. Lo salva un poco, pero muy poco, el final.
Excesivo el marketing para lo que es la novela. Empieza un poco lenta, incluso llega a aburrir, pero luego da un giro y se hace más interesante hasta un final arrollador.
Exceptuando el sorprendente final no me ha gustado nada, muy pobre.
El marketing ha sido fundamental para el despegue de esta novela.
Una primera parte aburrida a la que le sobra mucha paja. Estuve a punto de dejarlo. La segunda parte engancha más y el final es sorprendente. La historia está bien, es una pena que se enrolle tanto al principio en lugar de ahondar más en esos retazos de la vida de la protagonista que nos va mostrando con cuentagotas.