Resumen y sinopsis de La hoja plegada de William Maxwell
En los suburbios del Chicago de los años veinte, dos chicos inician una insólita amistad: Lymie Peters, un muchacho escuchimizado y un poco patoso que saca siempre buenas notas, y el recién llegado Spud Latham, un auténtico atleta y estudiante mediocre. Spud acepta la devoción de Lymie sin cuestionarla, pero al terminar el instituto y comenzar la universidad, aparecen las primeras tensiones entre ellos. Lymie es el primero en conocer a Sally Forbes, pero ella se enamorará de Spud; este hecho marcará el inicio del distanciamiento entre los dos amigos. Pero la ruptura es más de lo que Lymie podrá soportar.
Si en Vinieron como golondrinas Maxwell –el histórico editor del New Yorker y uno de los grandes de la literatura norteamericana del XX– elaboró un conmovedor retrato de la infancia y primera adolescencia, en La hoja plegada demuestra la misma sensibilidad y agudeza en mostrar el paso de la juventud a la edad adulta.
La hoja plegada es un ejemplo de sutileza emocional en una historia que, en principio, es de lo más simple y además está dirigida a un público que no suele destacar por el contenido sentimental de los libros que consume. Y eso hace que leer esta novela resulte tan refrescante y curiosa, porque no te esperas para nada que su autor pueda “golpearte” de esa manera.
William Maxwell firma la autoría de esta obra. Maxwell no es un escritor muy famoso, aunque como editor de la prestigiosa revista The New Yorker trabajó con lo más selecto de la literatura norteamericana. Y probó suerte con libros de relatos y con un par de novelas. Como autor Maxwell me parece notable. Y eso es debido a un estilo elegante, sencillo y emotivo que se apoya en una prosa rica, compleja y con un desarrollo magnífico, un lenguaje escogido con esmero para resaltar la musicalidad y unas descripciones maravillosas, llenas de matices y emociones que configuran unos paisajes materiales y sentimentales simplemente perfectos. Y así llegamos a los personajes que pueden ser lo mejor de toda la novela. Su construcción es magnífica. No solo están bien perfilados, sino que presentan evoluciones creíbles e inspiradas. Es un placer dejarse sorprender por ellos y descubrir el rumbo de la historia.
La hoja plegada es una novela que pretende representar un momento vital de la vida de cada Ser Humano, el paso de la adolescencia a la adultez. Pero, a pesar de que el tema en sí no es nada novedoso, la manera en la que está tratado, representando el enrevesado entramado de relaciones humanas que atan y desatan a sus personajes, resulta muy inesperado para el tipo, la trama y la época en la que está hecha. Pero haré una pequeña sinopsis para poneros en contexto. Estamos en el Chicago de los años 20. Nuestros protagonistas son Lymie Peters, miembro de una familia disfuncional y el típico nerd inteligente y estudioso; y Spud Latham, el típico musculitos guapo y bueno en los deportes, pero con un cerebro limitado. Entre ambos chicos se establece una extraña relación de amistad que no terminas de comprender del todo. Cuando los dos pasan a la universidad, van apareciendo grietas en su relación que terminan de una manera trágica. Y no puedo contar nada más. Parece ser que una novela que tenga una trama donde aparezca la relación de dos jóvenes no era muy común cuando se publicó el libro (1945) porque fue tildada rápidamente de novela “homosexual”. De ser así, Maxwell fue muy valiente dada la época. Pero, en mi opinión, en ningún momento se deja entrever nada sexual. Es solo una novela que explica que el tiempo nos cambia a todos y a las relaciones que establecemos entre nosotros. Y esta idea queda reflejada de manera sublime en el final. Puede que el desenlace te resulte un tanto anticlimático, abrupto o incluso abierto. Pero creo que el autor hubiera estropeado la impresión general del libro si hubiera continuado más allá.
En resumen, La hoja plegada es una lectura inesperada que no dejará indiferente a nadie que la lea. Es una pequeña joya, de esas que se te atraviesa en tu camino lector y que comienzas la lectura con reticencias para descubrir un autor que se había escapado de tu radar. Mi consejo es que le deis una oportunidad. Sobre todo si os encantan las novelas donde tanto las emociones como los personajes no se quedan estáticos. Y es que como una vulgar hoja plegada cualquiera, hemos de evitar que este gran clásico norteamericano se quede relegado a un cajón.
QuirosanLa hoja plegada5
Libro justo en comparación con "Vinieron como golondrinas". Pretende describir el paso de la niñez a la adolescencia sin mucho éxito al hacerlo con unos personajes bastante superficiales. Los EE. UU. de los años veinte si que se reflejan de fondo de manera excepcional.
majorebaLa hoja plegada7.5
Es una novela muy tierna sobre la amistad entre dos chicos. La narración se va deslizando lentamente, la historia se va desarrollando a través de la descripción de pequeñas escenas que van dando una visión global de la historia. La amistad incondicional llevada al extremo desencadena circunstancias bastante negativas.
La hoja plegada es un ejemplo de sutileza emocional en una historia que, en principio, es de lo más simple y además está dirigida a un público que no suele destacar por el contenido sentimental de los libros que consume. Y eso hace que leer esta novela resulte tan refrescante y curiosa, porque no te esperas para nada que su autor pueda “golpearte” de esa manera.
William Maxwell firma la autoría de esta obra. Maxwell no es un escritor muy famoso, aunque como editor de la prestigiosa revista The New Yorker trabajó con lo más selecto de la literatura norteamericana. Y probó suerte con libros de relatos y con un par de novelas. Como autor Maxwell me parece notable. Y eso es debido a un estilo elegante, sencillo y emotivo que se apoya en una prosa rica, compleja y con un desarrollo magnífico, un lenguaje escogido con esmero para resaltar la musicalidad y unas descripciones maravillosas, llenas de matices y emociones que configuran unos paisajes materiales y sentimentales simplemente perfectos. Y así llegamos a los personajes que pueden ser lo mejor de toda la novela. Su construcción es magnífica. No solo están bien perfilados, sino que presentan evoluciones creíbles e inspiradas. Es un placer dejarse sorprender por ellos y descubrir el rumbo de la historia.
La hoja plegada es una novela que pretende representar un momento vital de la vida de cada Ser Humano, el paso de la adolescencia a la adultez. Pero, a pesar de que el tema en sí no es nada novedoso, la manera en la que está tratado, representando el enrevesado entramado de relaciones humanas que atan y desatan a sus personajes, resulta muy inesperado para el tipo, la trama y la época en la que está hecha. Pero haré una pequeña sinopsis para poneros en contexto. Estamos en el Chicago de los años 20. Nuestros protagonistas son Lymie Peters, miembro de una familia disfuncional y el típico nerd inteligente y estudioso; y Spud Latham, el típico musculitos guapo y bueno en los deportes, pero con un cerebro limitado. Entre ambos chicos se establece una extraña relación de amistad que no terminas de comprender del todo. Cuando los dos pasan a la universidad, van apareciendo grietas en su relación que terminan de una manera trágica. Y no puedo contar nada más. Parece ser que una novela que tenga una trama donde aparezca la relación de dos jóvenes no era muy común cuando se publicó el libro (1945) porque fue tildada rápidamente de novela “homosexual”. De ser así, Maxwell fue muy valiente dada la época. Pero, en mi opinión, en ningún momento se deja entrever nada sexual. Es solo una novela que explica que el tiempo nos cambia a todos y a las relaciones que establecemos entre nosotros. Y esta idea queda reflejada de manera sublime en el final. Puede que el desenlace te resulte un tanto anticlimático, abrupto o incluso abierto. Pero creo que el autor hubiera estropeado la impresión general del libro si hubiera continuado más allá.
En resumen, La hoja plegada es una lectura inesperada que no dejará indiferente a nadie que la lea. Es una pequeña joya, de esas que se te atraviesa en tu camino lector y que comienzas la lectura con reticencias para descubrir un autor que se había escapado de tu radar. Mi consejo es que le deis una oportunidad. Sobre todo si os encantan las novelas donde tanto las emociones como los personajes no se quedan estáticos. Y es que como una vulgar hoja plegada cualquiera, hemos de evitar que este gran clásico norteamericano se quede relegado a un cajón.
Libro justo en comparación con "Vinieron como golondrinas". Pretende describir el paso de la niñez a la adolescencia sin mucho éxito al hacerlo con unos personajes bastante superficiales. Los EE. UU. de los años veinte si que se reflejan de fondo de manera excepcional.
Es una novela muy tierna sobre la amistad entre dos chicos. La narración se va deslizando lentamente, la historia se va desarrollando a través de la descripción de pequeñas escenas que van dando una visión global de la historia. La amistad incondicional llevada al extremo desencadena circunstancias bastante negativas.