El último vals de Matilda

Resumen y sinopsis de El último vals de Matilda de Tamara McKinley

Matilda, una mujer emprendedora, debe afrontar las peores hostilidades: el robo de su hijo recién nacido, el incesto y el poder de los terratenientes. Tras la trágica muerte de su marido y de su hijo, Jenny se da cuenta de que no tiene a dónde ir. No obstante, al poco descubre con sorpresa que su esposo le ha dejado en herencia unas tierras en Australia, unas cuantas hectáreas donde pastan a su antojo los rebaños de ovejas. Una vez allí, empieza a sentir algo por un hombre notablemente guapo, Brett Wilson, administrador de los bienes de Churinga. Oye hablar Matilda Thomas, cuya identidad se le hace confusa. Cuanto más averigua sobre Matilda, más se siente unida a la mujer que luchó con todas sus fuerzas contra el poder local. Y cuanto más tiempo pasa en Churinga más crece su atracción por Brett. Paralelamente, Jenny descubre en los diarios la verdadera tragedia de Matilda: cuando apenas era una preadolescente se quedó embarazada y dio a luz un niño que otra mujer le robó ese mismo día. El rumor fue había nacido muerto. Sin embargo, ese chico, Finn, sobrevivió y creció con otros apellidos; y veinticuatro años después acabó siendo el amante de Matilda. La verdad abocó a Matilda a una desesperación que acabó con su vida. La propia Jenny queda anonadada al enterarse que su marido era el hijo de ambos, fruto del incesto de Matilda y Finn.