Resumen y sinópsis de Zalacaín el aventurero de Pío Baroja
Compendio de los héroes barojianos que hacen de la acción el eje de su existencia, Zalacaín el Aventurero (1909) se caracteriza por su voluntad enérgica, desprovista de motivaciones ideológicas, su amor por el peligro y su capacidad para salir triunfador en la lucha contra la adversidad y el destino. Situada en el marco histórico de la última guerra carlista, en ella las aventuras se suceden con rapidez cinematográfica y prevalecen de largo sobre las teorías y la reflexión. De capital importancia en la visión del mundo de su protagonista es el viejo Tellagorri, vagabundo astuto y vividor, antisocial y anarquista, quien le transmite su amor por la naturaleza y le enseña a ser fuerte por encima de todo.Ha participado en esta ficha: albertojeca
Notable novela entorno a un personaje rebelde que vive en la montaña vasca. A través de él, veremos los conflictos de la guerra carlista dentro de los montes vascos, riojanos y navarros, con la frontera francesa siempre permeable a la huida o llegada de soldados o mercancías. Buenas descripciones de los pequeños pueblos montañeses, así como los montes que los circundan. Bastante entretenido, siempre acontecen cosas en el argumento.
Literatura en estado puro. Desde el primer momento se nota la corrección en la escritura, el vasto vocabulario y, a diferencia de los "best-sellers" actuales, el número adecuado de páginas. No por escribir más de mil páginas se está ante un buen libro.
La forma que tiene Pío Baroja de escribir es tan activa y entretenida que una trama, que en manos de otro escritor podría haber acabado en una obra soporífera, se convierte en puro arte. Es un libro tan bien trabajado y contextualizado que te retrotrae a los escenarios y disfrutas en cada página. Recomendable para todo el que disfrute de la literatura histórica.
Maravillosa y entrañable novela de aventuras que lleva la impronta característica de este grandioso escritor dotado de una rara sensibilidad para tratar tanto ambientes como personajes.
Entretenida novela breve que narra las aventuras acontecidas en la vida del joven Martín. La historia comienza de manera perezosa para envolverte conforme avanzas las páginas, llegando a enganchar al lector y finalizando con la sensación de quedar la historia un tanto incompleta. Pese a su brillantez, la obra me deja la sensación de una brillante historia que, tal vez, debí de haber leído en otra época, donde el resultado hubiese sido aun más brillante.
Se dice que es una obra menor de Baroja, aunque curiosamente y no se si por ello, era lectura de estudios obligada en mis tiempos. Entonces y ahora, la he leído siempre con cariño y disfrute, ya que se trata en el fondo, de una excelente novela de aventuras. De trama lineal y rápida, con un personaje que más que el pillo superviviente parece un adicto a la aventura sin motivación ideológica, recuerda al Ulises de Homero.
Es disfrutable también como libro de viajes, ya que los desplazamientos del protagonista durante las carlistadas, incluyen todo el territorio de Euskal Herria y Logroño, recreando estos parajes que para mí son tan familiares, pero en tiempos y con medios de transportes del pasado.
Es una novela de aventuras un tanto especial, nos da una idea de un personaje poco común y singular. Entretenida
Zalacaín me ha recordado a los clásicos pícaros que viven al día en un mundo de miseria. Lo que me ha resultado más interesante de este libro es su contexto histórico y geográfico: la guerra carlista después de la primera república, en el País vasco, Navarra, el País vasco francés y Logroño. También el costumbrismo o el contenido etnográfico que encontramos mientras describe las andanzas del protagonista.
Creo que algo aburrido, aunque se lee muy rápido.
Lleno de la lozanía y sagacidad de un buen aventurero, la historia no deja indiferente. El final es triste en muchos sentidos.
Como yo soy de ciencias puras jamás me lo habían hecho leer en el instituto (todos los de letras lo leyeron en mi época y, por lo que veo, muchos de vosotros también). Si te gusta el estilo Baroja, la novela costumbrista y la historia del siglo XIX (yo soy un enamorado de estas dos últimas cosas) te parecerá un libro entretenido. Si esperas encontrar aventuras trepidantes no las encontrarás. Las aventuras propiamente dichas de Zalacaín son bastante "inocentonas".
Muy entretenido, me lo leí en el cole y no le dí la importancia que merecía, puesto que hace dos meses lo cogí y me lo zampé en tres días.
Muy bueno, en la línea de Baroja.
Fácil de leer, divertido y entretenido. Recomiendo su lectura.
Relectura obligatoria. Quizá su inclusión como materia de estudio en plena adolescencia nos coja escasamente preparados para su disfrute. Con unos conocimientos históricos y geográficos más asentados, la novela es una delicia. Aventura pura y dura, con ejércitos, intrigas políticas, huidas, montañas y amoríos, desde el Norte de Navarra hasta Logroño, pasando por Guipuzcoa, Estella y la Rioja Alavesa, y todo ello, en el seno del levantamiento carlista del último tercio del siglo XIX. A disfrutar.