Cuentos de terror para contar alrededor del fuego

• No hay nada como una buena historia de horror a medianoche.
• Hoy os traemos algunos de los mejores cuentos del género de terror.

Cualquier noche es buena para reunirse junto al fuego y compartir historias capaces de helar la sangre de los más sensibles. Narraciones extraordinarias de asesinatos cruentos, familias decadentes, aparecidos, demonios, fantasmas de triste figura, gatos negros, vampiros, hombres que se transforman en bestias, dioses envidiosos, científicos malvados y sus criaturas inhumanas. Hoy os traemos una pequeña e interesante selección de algunos de los mejores cuentos de terror que ha dado la historia de la literatura. ¿Os animáis a compartir con nosotros vuestros relatos favoritos?

Empezamos con El pozo y el péndulo, uno de mis relatos favoritos de Poe y que combina a la perfección la angustia frente a la muerte junto a la indefensión, el miedo a lo desconocido y el escenario propio del grand guignol. Tiene uno de los mejores tempos para narrar en voz alta y es genial poder ver la cara de la gente cuando lo escuchan por primera vez.

La muerta enamorada es de mis relatos favoritos de Teófilo Gautier. Publicado en 1836, estaríamos ante uno de los primeros grandes relatos de vampiros. Es una historia clásica, por supuesto, y hoy en día puede parecer muy manida, pero lo cierto es que en su momento marcó el género por completo.

Vamos con un autor español, Pedro Antonio de Alarcón, que en 1881 publicó La mujer alta, una de las grandes joyas del género de terror en castellano. Es una historia de apariciones que hoy en día casi podría convertirse en una leyenda urbana, ya que su fantasmal protagonista debería ser un icono del horror más clásico.

Maupassant nos dio algunos de los mejores relatos de terror del siglo XIX, entre ellos uno indispensable como es El Horla. Contado en forma de diario, en este cuento asistimos a otra visión del vampirismo, inquietante y asombrosa. Maupassant transmite de manera genial la ordalía por la que pasa el protagonista.

Otro de mis favoritos es El almohadón de plumas, de Quiroga. Un cuento corto, cortísimo, pero que causó un gran impacto en su época. Hoy en día quizá pueda parecer algo ingenuo, pero creo que sigue manteniendo gran parte de su fuerza. Es muy recomendable recuperar a Quiroga como uno de los grandes clásicos del terror.

Vamos a dejar un poco el siglo XIX, aunque los grandes clásicos de terror son casi todos de esta época, y vamos a hablar de algunos más recientes. Sería fácil hablar de Stephen King aquí, así que vamos a recomendar uno de los mejores cuentos de su hijo, Joe Hill, titulado, como no podría ser de otra forma, El mejor cuento de terror. Está publicado en la antología de Fantasmas y es un caramelo para todos los aficionados al género.

Y no podemos abandonar este incompleto listado -esperamos vuestras recomendaciones-, sin poner un cuento de Clive Barker, a mi juicio uno de los mejores autores de terror de los últimos treinta años. Cualquiera de sus relatos de Los libros de sangre valdría, pero vamos a destacar Lo prohibido. Este cuento dio lugar a la película Candyman y me encanta por cómo mezcla conceptos e ideas diferentes, azuzando la curiosidad del lector a la vez que lo atemoriza. De quitarse el sombrero.

¿Y vosotros? ¡Queremos saber cuáles son vuestros cuentos de terror favoritos! Dejadnos la lista en los comentarios.